UManresa recibe a 32 docentes y estudiantes de Enfermería de Alemania, Bélgica, Portugal y Eslovenia que participan en un programa formativo basado en simulación y seguridad del paciente
32 personas procedentes de la Haute École Libre de Bruxelles Ilya Prigogine (Bélgica), la University of Ljubljana (Eslovenia), la Ostfalia University of Applied Sciences (Alemania) y el Instituto Superior de Saúde do Alto Ave (Portugal) participaron, entre el 31 de marzo y el 4 de abril, en la semana presencial del primer programa Erasmus+ BIP organizado por UManresa. El estudiantado y profesorado de estos países realizaron una estancia formativa práctica sobre la metodología de la simulación y la seguridad del paciente. El programa ha sido impulsado por un equipo docente del Grado en Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa y coordinado por la Oficina de Relaciones Internacionales de UManresa, mientras que las actividades formativas han sido desarrolladas por el equipo de CISARC Simulación.
El Erasmus+ BIP (Blended Intensive Programme) es un programa de estudios en el extranjero de corta duración que combina actividades virtuales y una estancia presencial en una universidad europea. Esta ha sido la primera vez que UManresa lidera la organización de un programa de estas características y también la primera en el ámbito de los estudios de Enfermería de la Universitat de Vic – Universitat Central de Catalunya (UVic-UCC).
La iniciativa surgió de un grupo de docentes del Grado en Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa que, en el marco de distintas estancias internacionales, detectaron el interés y plantearon la posibilidad de impulsar un programa BIP en UManresa centrado en una de las áreas de especialización del Campus Manresa: la seguridad del paciente y la metodología de la simulación, ambas directamente relacionadas con los estudios de Enfermería y de Ciencias de la Salud. Además, UManresa dispone de uno de los centros reconocidos internacionalmente en el ámbito de la simulación, CISARC, y acoge la sede de la Cátedra de Simulación y Seguridad del Paciente de la UVic-UCC.
Las cuatro universidades participantes y la Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa iniciaron el programa a principios de año con las acciones formativas teóricas, que se realizaron en línea. Esta formación teórica consistió en preparar al estudiantado del Grado en Enfermería para que fuera capaz de crear, en base a unos objetivos, y facilitar su propia simulación clínica. El programa concluyó la semana pasada con la estancia del profesorado y estudiantado internacional, que les permitió poner en práctica el trabajo previo.
La simulación, una herramienta metodológica para mejorar la seguridad del paciente
La estancia de estos estudiantes y docentes se desarrolló principalmente en las instalaciones de CISARC Simulación. Dirigidos por el equipo de profesionales del centro de innovación en simulación de UManresa, y con la colaboración de docentes del Grado en Enfermería, los participantes realizaron una inmersión en la metodología de la simulación para descubrir su utilidad en el día a día profesional.
Las actividades de simulación se centraron en el manejo de situaciones críticas en enfermería, desde el diseño de casos hasta la organización de las actividades, así como la estructura del debriefing posterior a las simulaciones. Tras este trabajo, se llevaron a cabo las simulaciones de los casos diseñados.
Según explica la directora de CISARC, Aida Camps, las actividades en las que participaron tenían como principal objetivo “entrenar tanto a los alumnos como a los profesores para convertirlos en instructores de simulación. Los estudiantes, que son futuros profesionales, deben conocer cómo esta metodología puede ayudarles en el entrenamiento de sus competencias en beneficio de la seguridad del paciente”. Camps añade que el objetivo de la estancia era que tanto docentes como estudiantes aprendieran que “las conversaciones que se establecen en el debriefing de una simulación pueden permitirles ir más allá y mejorar tanto la calidad de la atención al paciente como su seguridad”. “Todas las actividades”, añade, “se han enfocado de manera que esta semana formativa les permita dar un paso más y ver todo el potencial de la simulación”.
Una experiencia de cohesión
El balance que han hecho los participantes de esta experiencia ha sido muy positivo. Todos los integrantes de las delegaciones de las distintas universidades destacaron la cohesión y colaboración entre equipos, así como los aprendizajes adquiridos. Incluso plantearon la posibilidad de redactar un artículo científico colaborativo sobre la experiencia.
Además de las acciones formativas, durante su estancia en Manresa, el grupo de docentes y estudiantes pudo disfrutar de una visita guiada por la ciudad medieval y de una cena gastronómica.
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