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Comadronas en las aulas

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Imatge de la simulació d'un part a les aules del CISARC
05/05/2023

Hoy, cinco de mayo, se celebra el Día Internacional de las Comadronas, una conmemoración instaurada en 1991 por parte de la Organización de las Naciones Unidas para poner de relieve la importante función que desarrollan en la salud de las madres, niños y familias. Con motivo de esta conmemoración, hablamos con dos docentes de UManresa que ejercen esta profesión, Marta Jiménez Barragan y Esther Romero Simon, titulares de la asignatura del grado en Enfermería “Cuidados enfermeros a la mujer en la maternidad y en la salud reproductiva ”.

¿Cómo es el trabajo de una matrona?

Hacer de matrona en una consulta de atención primaria suele ser una tarea que tiene una gran conexión con las personas del territorio en las que ejerces la profesión. Somos los profesionales de referencia y somos la puerta de entrada a la sanidad pública y además podemos ver a estas personas que tratamos desde diferentes vertientes. A nuestra consulta vienen mujeres con problemas físicos: molestias vaginales, dolores menstruales, cambios físicos en el parto, post parto, climaterio y menopausia, cambios y dificultades en la lactancia materna, molestias y dificultades en las relaciones sexuales… También atendemos consultas más relacionadas con aspectos psíquicos: cambios psicológicos en el puerperio, en la gestación, en un aborto, en el inicio de la crianza de los hijos, en problemas y alteraciones de la sexualidad a lo largo de la vida, en un abuso o agresión sexual … Y finalmente, nos hacemos cargo también de la atención y la gestión emocional, de todas aquellas emociones que afloran en la gestación, los miedos y los bloqueos antes del parto, las dificultades o avances en el post parto, la forma en que se gestionan las emociones ante una pérdida (un aborto o pérdida perinatal,…) cómo se gestiona el duelo por otras pérdidas, como por ejemplo intervenciones de mama, útero, ovario… Atendemos también situaciones tan diversas como la reacción de una pareja frente a un diagnóstico de infertilidad, o cómo afrontar un diagnóstico de enfermedad de transmisión sexual, de una violación. El nuestro es un trabajo de preguntar, escuchar, intentar resolver y gestionar cada situación para ayudar a resolver problemas que angustian o que hacen sufrir a una mujer.

¿Tiene suficiente visibilidad su trabajo?

No, suele ser un trabajo muy invisible. Seguramente porque en la mayoría de casos, los problemas forman parte de la intimidad de la mujer, pero también porque la persona que confía en ti como matrona sabe que guardarás el secreto profesional.

¿Cómo aplica sus conocimientos y experiencia a las clases universitarias?

La asignatura de cuidados enfermeros a la mujer trata todos y cada uno de los temas que vemos como profesionales en la consulta, pero también es una asignatura con un temario amplio y muy concentrado. El hecho de trabajar de matrona y vivir con intensidad lo que ocurre cada día en la consulta nos permite utilizar el relato de estas historias -guardando siempre el anonimato- para ilustrar, para poner color, para poner sentimientos y emociones en la parte teórica de la asignatura que nos han encomendado. Dar clases en la universidad nos obliga a estar actualizadas de protocolos y circuitos, técnicas y procedimientos quirúrgicos, médicos, farmacológicos y dietéticos, de conceptos de anatomía, salud pública, salud mental e investigación. Pero una parte importante de la docencia pasa también por intentar explicar, escenificar, crear material, por intentar concretar una idea y ya no sólo de manera teórica, sino por crear una sensación visual, táctil o emocional para que esta idea quede en el imaginario de el alumnado.

En vuestro día a día como docentes, ¿veis vocaciones en vuestra especialidad?

A nosotros nos apasiona nuestra profesión. Faltan comadronas en el territorio. El hecho de estar en contacto con las enfermeras del futuro nos gustaría que sirviera para contagiar un poco esa sensación y esa pasión por el trabajo que hacemos. Si lo conseguimos, seremos un poco más felices.

Marta Jiménez Barragan y Esther Romero Simon, comadronas y docentes del grado en Enfermería de la Facultad de Ciencias de la Salud de Manresa

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