Un globo aerostático que sufre un accidente en un merendero donde se celebran varias fiestas de cumpleaños. Éste es el escenario que se recreó el pasado viernes, en el Aeródromo de Sallent, en el marco del Máster de Emergencias Extrahospitalarias y del Curso de Incidentes de Múltiples Víctimas y Catástrofes de la Escuela de Postgrado de UManresa. El simulacro movilizó a más de un centenar de personas, de las cuales 56 eran alumnado del máster y del curso.

La Escuela de Postgrado de UManresa organiza cada año un simulacro de grandes dimensiones para cerrar tanto el curso como el máster. El objetivo de esta actividad es poner en práctica los conocimientos adquiridos en ambas formaciones. La finalidad del simulacro es que estas personas vivan una situación cercana a la que podrían vivir en un accidente real y que tengan que enfrentarse a un desbordamiento por el bajo número de efectivos y la gran cantidad de víctimas que deben ser atendidas. La previsión inicial era de 76 víctimas, de las cuales dos eran mortales, 19 graves, 21 menos graves y 34 leves.

Una vez culminado el simulacro, todos los alumnos y docentes evalúan la actuación en un debriefing, que en esta ocasión se llevó a cabo al día siguiente sábado. Este debriefing sirve para analizar en qué aspectos se han cometido errores y cómo podría haberse actuado para mejorar la atención a las víctimas.

Una vez más, el simulacro ha contado con diversas colaboraciones. Este año han sido la empresa Kontiki, que cedió la cesta del globo y colaboró en el diseño del accidente; la Federación Bages-Moianès y Manresa del ADF; Protección Civil de Manresa y del Bages; el equipo de maquilladoras de Esther Castellana, encargado de caracterizar a las víctimas heridas; el Aeródromo de Sallent; y Transporte Sanitario de Cataluña, el Sistema de Emergencias Médicas y Cruz Roja, que han colaborado tanto en la aportación de ambulancias como de personal y voluntarios.