El programa FUB+GRAN de UManresa cumple diez años
UManresa ha celebrado este miércoles el acto de clausura del curso 2021-2022 del programa FUB+GRAN, una iniciativa que nació en el curso 2012-2013 con la finalidad de promover el aprendizaje a lo largo de toda la vida y de acercar personas mayores de 55 años a la Universidad. Este año se conmemora el décimo aniversario, un hito que ha estado presente en los parlamentos del acto de entrega de diplomas a las 105 personas que han participado en esta última edición del programa. La socióloga y escritora Clara Fons ha sido la encargada de hacer la lección de despedida a los alumnos de esta edición. El acto también ha contado con la asistencia del adjunto a la dirección general de la Fundació Universitària del Bages, Antoni Llobet, la vicerectora del campus Manresa de la UVic-UCC, Sílvia Mas, y de la coordinadora del programa, Sílvia Mampel. Diego Ramon Alías Casado ha hablado en nombre de los alumnos y la coral del programa FUB+GRAN ha cerrado la conmemoración con una breve actuación y con la interpretación del himno universitario, Gaudeamus Igitur.
En la lección de despedida, Clara Fons ha calificado a todos los participantes en el programa FUB+GRAN como personas que tienen en común el interés por crecer por dentro, espiritualmente, y por contribuir, de esta manera, a la mejora de la sociedad. Por su lado, Sílvia Mampel, ha hecho un listado de palabras clave que definen a este alumnado: constancia, curiosidad, perseverancia, empatía, amistad, motivación, sabiduría o fidelidad, entre otras. El representante de los alumnos ha agradecido a la Universidad que haya dado esta segunda oportunidad para aprender a personas que no lo pudieron hacer en su momento, y Valentí Martínez, director general de la Fundació Universitària del Bages, que ha intervenido en un vídeo grabado, ha dicho que todas las personas que forman parte de FUB+GRAN son una parte importante de la comunidad universitaria y les ha agradecido el compromiso y el entusiasmo por continuar aprendiendo. La última en intervenir ha sido la vicerectora del campus Manresa, Sílvia Mas, que ha afirmado que con su presencia en la Universidad, el estudiantado del programa "enriquece la universidad porqué aportan un largo recorrido vital y profesional y la hacen intergeneracional y cohesionada".
10 años de trayectoria y más de mil inscripciones
Lo que nació como una oferta formativa dirigida a personas mayores de 55 años se ha consolidado como un programa al entorno del cual han nacido otras actividades paralelas y que ha fomentado la relación entre personas de una misma generación, la mayoría de las cuales ya ha terminado su trayectoria laboral y buscan una manera de continuar adquiriendo conocimientos y alimentando su curiosidad intelectual. A pesar de este perfil, explica la coordinadora del programa, Sílvia Mampel, cada vez es más habitual que los alumnos sean personas más jóvenes, incluso personas en activo que tienen inquietudes para continuar aprendiendo. De hecho, explica, el aspecto relacional es uno de los puntos fuertes de este programa, hecho que quedó cloro durante la pandemia, cuando ninguno de los alumnos quiso substituir la formación presencial por formación online.
El programa se inició durante el curso 2012-2013 con solamente 16 personas, algunas de las cuales todavía continúan asistiendo a las distintas formaciones. En sus inicios, el programa ofrecía un itinerario formativo común para todo el mundo que con los años se ha ido ampliando con formaciones e itinerarios más específicos adaptados a los intereses del alumnado. "El boca a boca funcionó muy bien y enseguida el número de inscritos fue creciendo hasta llegar a los dos centenares de inscritos en un curso", explica Mampel. En estos 10 años de trayectoria, el programa ha tenido muy buena respuesta y se ha llegado a superar el millar de inscripciones en todas las actividades que se han realizado.
La coordinadora del programa destaca también la vertiente social que se genera al entorno de FUB+GRAN, que permite a los participantes conocer a personas nuevas, hacer amistad, participar en actividades como la Coral o el Cineclub y establecer nuevas relaciones en una etapa vital en la cual no es muy habitual. Para Mampel, tanto el aspecto social, como la diversificación de la oferta temàtica de las formaciones y la calidad del profesorado son las principales claves del éxito de este programa.